Medicina Tradicional China

Monica Baum Disciplinas

La medicina tradicional china tiene bases filosóficas, no científicas newtonianas, como la medicina que prevalece en Europa y América. En consecuencia, no es considerada una ciencia en el sentido occidental, pese a que, junto con la medicina india ayurveda, es de las más antiguas. Se ha podido comprobar que su desarrollo se remonta a 5000 años antes de Cristo.

El corpus de la medicina china es un conocimiento ancestral que se fundamenta en la comunión entre mente, cuerpo y espíritu, y, a su vez, en su armoniosa relación con la naturaleza, con la tierra. “La relación que tengas con el mundo es la relación que tendrás con vos mismo”, es una de sus premisas ya que considera que tenemos dos mundos: el externo y el interno, y observando los ciclos y las leyes de la naturaleza, podremos comprender las leyes que gobiernan el funcionamiento del cuerpo humano.

Aquí nos encontramos con una de las principales críticas que le hace la medicina china a la occidental, el buscar el remedio afuera sin tener en cuenta que en el cuerpo mismo, en el interior de la persona se encuentra la curación.

De la observación de las leyes de la naturaleza toman también un concepto que es crucial en la filosofía china, la del yin y yang, las dos fuerzas fundamentales, opuestas y complementarias, que se encuentran en todas las cosas. Como el día y la noche, son antagónicos pero uno no está completo sin el otro. Así como no todo es bueno ni todo es malo, el exceso o la insuficiencia deben buscar la armonía y el equilibrio.

En tanto yin es considerado el principio femenino, el yang es el principio masculino, aun así, cada uno de los dos elementos puede volver a subdividirse en yin y yang, evitando así cualquier posibilidad de una polarización simplista.

La observación del desequilibrio entre el yin y el yang, dan pistas al especialista en medicina china, sobre dónde está la causa de la falta de salud y de su curación.

Pero falta todavía otro concepto decisivo de la filosofía que sustenta la medicina tradicional china: el chi, el flujo vital de energía, tal vez lo más parecido al alma en la concepción cristiana. El chi es para un organismo viviente, lo que la electricidad es para cualquier aparato eléctrico, sin la cual no funciona.

Resumiendo entonces: la medicina china sostiene que la salud de una persona radica en el equilibrio entre el yin y el yang, movilizado por el chi, la energía vital. Cuando este equilibrio se rompe aparece la enfermedad. Cualquier tratamiento se enfocará en restablecer esta armonía resquebrajada o perdida.

Principales métodos de la medicina china

Las técnicas terapéuticas que utiliza la medicina tradicional china son tal vez más conocidas en Occidente que las bases filosóficas que las sustentan. Una de ellas, la acupuntura, con su auxiliar, la moxibustión, incluso fueron inscriptos en la lista representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, de la UNESCO.

Según refiere la propia UNESCO, las teorías relativas a la acupuntura y la moxibustión sostienen que el cuerpo humano es un pequeño universo unido por canales que, mediante una estimulación física del acupuntor, pueden estimular las funciones de autorregulación del organismo y sanar a los pacientes. Esta estimulación se efectúa insertando agujas en determinados puntos de esos canales (también denominados meridianos), o quemando moxa, una especie de cigarro armado con las hojas pulverizadas, secadas y trituradas de la planta Artemisia vulgaris.

Otro método de la medicina china para recuperar o mantener la salud es el Chi kung, que, en realidad, agrupa una serie de técnicas físicas que involucran la mente, la respiración y el ejercicio físico. Busca que la persona pueda sentir y controlar su propio circuito energético.

La fitoterapia es otra columna vertebral de la medicina china y refiere a los tratamientos con hierbas y plantas medicinales, y sus raíces.

La dietética china también es central en los tratamientos médicos chinos. Propone una alimentación más basada en vegetales, frutas y verduras, así como ciertos caldos energéticos que influyen directamente en el chi.

En esta enumeración no se pueden excluir la Tuina, técnica que utiliza el masaje sobre los meridianos de la acupuntura como medio terapéutico, y la ventosaterapia, que implica generar una presión con ventosas para estimular la circulación de la sangre y aliviar el dolor .

La médica china que ganó el Premio Nobel en medicina

En 2015 China ganó por primera vez un Premio Nobel en Medicina y Fisiología, gracias a la científica, médica y química farmacéutica china Tu Youyou, quien descubrió la artemisinina (de la misma planta con la que se hace la moxibustión), utilizada para tratar la malaria y con la cual se salvaron millones de vidas.

Después de recibirse de médica, Tu Youyou estudió varios años los remedios tradicionales chinos por lo que sabía que las plantas podían curar todo tipo de enfermedades. Al buscar algo que detenga el avance de la malaria, comenzó por analizar una serie de plantas medicinales en busca de un principio activo que cumpliese ese objetivo.

En tal sentido, el punto de partida de su investigación fue la exploración de textos sobre medicina china tradicional, por lo cual, el premio fue una suerte de reconocimiento de Occidente de la validez de los postulados de este tipo de medicina.

Más cerca pero no menos llamativa fue la noticia, cuando el cardenal argentino Jorge Bergoglio fue electo Papa, que el mismo desde hacía años venía siendo atendido por el médico y monje taoista Liu Ming, radicado en Buenos Aires.

Sin duda, la milenaria Medicina Tradicional China, no necesita pertenecer a los cánones de la ciencia occidental para expandir sus principios filosóficos, sanar a las personas y llevar armonía a sus vidas.

 

 

 

Texto publicado originalmente en NewsArgenChina